Las investigaciones preveen que seria necesario cazar hasta 300.000 focas al año para que sus válvulas fuesen implantadas en ciudadanos europeos. Además cada válvula podría llegar a costar unos 3.500 euros, lo que equivale a una cifra de más de 1.000 millones anuales.
El embajador está de visita en la Unión Europea tratando de impedir que los 25 prohíban la importación de todos los productos derivados de la foca, tal y como ya han hecho a título individual Holanda y Bélgica. Esta petición se debe especialmente a los CRUELES métodos de caza de focas, que habitualmente son golpeadas en el cráneo con una vara de madera que tiene un pincho en su extremo, lo que no siempre les provoca la muerte al primer golpe. Acto seguido, y según las organizaciones ecologistas en ocasiones con el animal todavía vivo, los cazadores proceden a arrancar la piel del animal.
....Sin Palabras....Fuente: El Mundo
No hay comentarios:
Publicar un comentario